La comunicación entre el personal y yo fue rápida y útil. Me llamaron un par de veces para asegurarse de que todo estuviera en orden. También se aseguraron de que estuviera muy seguro; había algunas condiciones climáticas preocupantes y se aseguraron de que estuviera seguro y disfrutara del entrenamiento.
A mi llegada, mi instructor, Dale, me explicó todas las habilidades con claridad y humor. Cuando entramos al agua, se aseguró de evaluar mis necesidades en cada punto. ¡Él me animó y gracias a él pasé!
La zona donde imparten el curso, Escambrón, es muy linda, confinada y tiene algo de vida marina observable. Las instalaciones eran accesibles y cómodas.